Un 26 de julio de 1952, a la temprana edad de 33 años, la Argentina se conmocionaba con la noticia del fallecimiento de Eva Duarte de Perón, la “Abanderada de los Humildes”. A 73 años de aquel día, la memoria de Evita se renueva, y su impacto en la historia y la cultura del país sigue siendo innegable e ineludible.
Eva Perón se convirtió en una de las figuras más influyentes del siglo XX argentino. Desde su rol como Primera Dama durante la presidencia de Juan Domingo Perón, impulsó transformaciones sociales profundas. Fue una ferviente defensora de los derechos de los trabajadores y de los más desfavorecidos, canalizando su acción a través de la Fundación Eva Perón, que brindó asistencia social, construyó hospitales, escuelas y hogares, y distribuyó bienes a gran escala. Su papel fue crucial en la sanción de la Ley de Sufragio Femenino en 1947, que garantizó a las mujeres argentinas el derecho a votar y ser votadas, marcando un antes y un después en la vida política del país.
Su muerte, producto de un cáncer, sumió al país en un profundo luto. Millones de personas salieron a las calles para despedir sus restos, en una muestra de dolor y devoción popular que evidenció la estrecha conexión que había forjado con las clases más populares. Este vínculo, forjado en la cercanía y la acción social directa, la elevó a la categoría de mito, trascendiendo incluso las barreras políticas.
Con el paso de las décadas, la figura de Eva Perón ha sido objeto de múltiples interpretaciones, adorada por sus seguidores y criticada por sus detractores. Sin embargo, su capacidad de movilización, su oratoria encendida y su compromiso con la justicia social la establecieron como un ícono ineludible. Su nombre sigue siendo un estandarte en el peronismo y un referente constante en el debate sobre los derechos sociales, la igualdad y el rol del Estado, confirmando que, a 73 años de su partida física, Evita vive en la esencia de la política y la sociedad argentina.
Esta nota fue elaborada con base en datos históricos sobre la vida y el legado de Eva Duarte de Perón. AiresNuevosNQN se ampara en la Constitución Nacional, la Ley 26.032 y tratados internacionales que garantizan la libertad de prensa y el derecho a informar sobre asuntos de interés público.